Josefina Digital

Nuestra primera visita fue la Iglesia Anglicana de Las Palmas de Gran Canaria en la cual pudimos contemplar el exterior y más tarde su interior. Principalmente los planos de la Iglesia fueron construidos dado la vuelta y fueron diseñados en Londres, nos hablaron sobre como trajeron al cura de Cierra León y sobre como los anglicanos iban a esta Iglesia para rezarles a los fallecidos en la 1º y 2º Guerra Mundial. Entre otros datos, como el Rey Manuel VIII que era la máxima autoridad en la Iglesia, nos mencionaron el cómo transportaban mercancía como vegetales a Canarias mediante barcos para ser plantados en la isla.
Nuestra siguiente parada fue en la casa Britihs Club, donde nos separamos en dos grupos para poder entrar de una manera más cómoda, dentro de la casa se podían observar una infraestructura de la época con numerosos cuadros, espejos y cartas los cuales reúnen la historia y el propósito de este club. Cabe mencionar que la planta inferior de esta casa de dos pisos bastante antiguos se conserva en buen estado tanto así que la alquilaron y ahora la primera planta es una limpia cafetería y una tienda. Mientras observábamos la casa por su interior nos contaron acerca de la construcción de dicha casa, a su ves enseñándonos los cuadros de personas que estuvieron en su día en el British Club, junto a retratos de presidentes y cartas de la época.
Para finalizar este recorrido, nuestra última parada fue en el cementerio Inglés en el cual tuvimos la oportunidad de pasar y poder contemplar las tumbas de los difuntos, al llegar al cementerio nos hicieron una pequeña introducción sobre lo que veríamos a continuación. Nos comentaron que muchos de los vecinos no sabían de su existencia y fue creada con para poder enterrar a los británicos sin complicaciones ya que el Ayuntamiento ponía varias condiciones para enterrarlos en el Cementerio Católico de Vegueta. En dicho cementerio pudimos observar varias tumbas de las cuales nos contaron como eran la vida de esas personas difuntas y entre ellas también habían tumbas de acero en forma de cruz, dando como significado tras la explicación del guía que se trataban de niños o incluso de bebés fallecidos.
En mi opinión personal considero que fue una ruta bastante curiosa más que entretenida, considero que fue en parte algo interesante por las charlas y datos que nos mencionaban sobre los británicos y su llegada a las islas y para finalizar esta reflexión y opinión personal, el lugar que más me llamo la atención sin duda alguna fue la Iglesia Anglicana por su pasado.